Los resultados trimestrales decepcionaron fuertemente al mercado. La compañía ha registrado, por primera vez en muchos trimestres ,una contracción en el número de suscripciones activas (-200.000), cifra que no gustó para nada a las principales casas de análisis. Sin embargo, muy probablemente el catalizador negativo no fue propiamente las suscripciones actuales si no más bien las previsiones para el resto del ejercicio. Netflix hizo un ejercicio de «realismo» y prevé que la actual situación macro unido a la fuerte competencia en el sector puede lastrar/congelar su crecimiento, como mínimo, a corto plazo.

El violento hueco de ruptura bajista dejado tras la presentación (350 dólares cierre – 250 dólares apertura posterior), generó una violento señal técnica que presionará al valor durante las próximas semanas. Los 210 dólares son, por el momento, la referencia a batir. Su superación desencadenaría la formación de una «tímida» figura de vuelta alcista cuya proyección podría catapultarle rápidamente hacia los 227.5 dólares zonales. Una vez allí, Netflix debería intentar dar continuidad al movimiento y prolongar el impulso rumbo a los 250 dólares. Una vez allí, el valor podría iniciar una dura travesía en el desierto e intentar rellenar, aunque sea parcialmente, el violento hueco dejado el pasado 19 de abril. Por abajo, los 186 dólares son la referencia de soporte a vigilar. Su pérdida volvería a dejar al valor en fase de caída libre, escenario proclive para iniciar un nuevo impulso correctivo en busca de su siguiente soporte estructural, es decir, los 164 dólares zonales.
Soportes: 186, 180, 164, 150 dólares
Resistencias: 210, 227.5, 250, 280, 300 dólares
Objetivos: (alcista) 225, 250, 320 (bajista) 160, 145 dólares zonales