La empresa especializada en equipamiento de piscina y wellness finalizó los seis primeros meses del año con un beneficio neto de 174 millones de euros, triplicando los beneficios del primer semestre de 2020 con unas ventas de 1.187 millones de euros, un 54% más que en el mismo periodo de 2020. Por lo que respecta al EBITDA (beneficio antes de impuestos, intereses y amortizaciones), registró una subida del 95% hasta los 330 millones de euros y el beneficio de caja neto, un indicador clave para Fluidra que excluye las partidas no monetarias y los gastos no recurrentes, aumentó un 157% hasta alcanzar los 216 millones de euros.
La espectacular subida protagonizada durante los últimos 16 meses, en abril de 2020 cotizaba entorno a los 8 euros zonales, le ha llevado a multiplicar 4.5 veces su capitalización bursátil. Todo ello inmerso en un estrecho canal alcista que ha sido capaz de respetar en todas las correcciones intermedias. Los 35-34.60 euros zonales es el rango a vigilar. Un cierre diario por debajo de dicha cota confirmaría la ruptura a la baja del canal, potencial señal correctiva que podría desencadenar el inicio de un tramo de consolidación lateral-bajista a corto plazo. Los 32 euros pasarían a ser su primer objetivo de caída aunque no sería para nada descartable una prolongación adicicional en busca de los 28-28.20 euros zonales, cota por donde transcurre actualmente su media móvil de 200 sesiones.
Por arriba, los 37.25 euros es la resistencia a batir. Su superación definitiva volvería a dejar al valor en fase de subida libre, escenario proclive para iniciar un nuevo impulso alcista en busca del techo del canal, es decir, el nivel de los 40-40.25 euros zonales.